El funcionario afirmó que no habló con la jefa de Estado sobre el tema -"Hablé cuarenta veces, pero de este tema no"- y consideró que la exposición del fiscal en el Congreso será "tan pobre, tan mala, de pésima calidad, tan insensata, que se va a ver en figurillas para explicarle a los diputados qué es lo que hizo".
Fernández dijo que "no discute" la situación del ex funcionario kirchnerista Luis D'Elía y del referente de la agrupación Quebracho, Fernando Esteche, involucrados en la denuncia realizada por Nisman, porque dijo que se trata de "ciudadanos comunes que tienen que dirimir cosas en el marco de un tribunal si son citados a declarar".
"Yo discuto o defiendo la República y la Presidencia de la Nación, ni siquiera a la Presidenta, porque ella es muy grande y se defiende sola, no me necesita a mí", expresó el funcionario en declaraciones a radio Continental.
En ese sentido, manifestó que discute "la desproporción, lo ridícula de una posición que no tiene nada que ver y lo que hace es enlodar la imagen de la Presidenta, con razones que responden a otra estructura, en este caso como la Secretaría de Inteligencia con algunos de sus ex miembros".
El secretario general de la Presidencia expresó que Nisman "no tiene derecho a decir absolutamente nada de lo que está diciendo, está todo inventado".
"Tengo que creer que en el marco de esa invención está todo ligado a la respuestas a otra estructura, como la de Jaime Stiusso, a la cual el respondía como si fuera su jefe", sostuvo Fernández en alusión al agente separado en diciembre de la Secretaría de Inteligencia.
Consultado sobre si cree en la responsabilidad de ciudadanos iraníes en el atentado perpetrado contra la mutual judía en 1994, Fernández dijo: "yo no tengo que creer ni dejar de creer, es un tema que tiene que resolver la Justicia. La Justicia ya se expidió en ese aspecto". "Ellos fueron los que dijeron que había 9 ciudadanos que tenían que prestar declaración indagatoria y ninguno de nosotros trabajó en contra, trabajó a favor. De los 9, 8 eran iraníes y uno era libanes", manifestó.
"Quedaron 5 ciudadanos iraníes con notas rojas que no pueden salir de su país y que estando en cualquier país Interpol tiene obligación de detenerlos", expresó el funcionario y destacó que eso "lo hemos conquistado por el esfuerzo que hicimos nosotros".
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